GRACIAS POR TU VISITA

TETA NEWS

Disculpen las molestias. Se me hace imposible seguir
actualizando el blog de La Teta Feliz por problemas de tiempo, por mi trabajo. Yo sigo en mi blog personal, y tratando de actualizar La Teta Historia. Pero no La Teta Feliz. Sepan Disculpar.

Atte Jjaxxel



23 mar 2014

La vida es un paso a la vez - Sankh - 34

Capítulo 34:
-      Hija deberías salir un poco al patio, respirar aire fresco, caminar un poco, necesitas hacerlo, es parte de la recuperación temprana.
-      No tengo ganas Mamá. – respondió Amanda ensimismada.
Estela respiró profundo como desilusionada de la respuesta, ya hacia una semana que Amanda había llegado a la casa y cada día la veía más deprimida; esa silla de ruedas la hacía sentir inútil, así que Estela solo quería que pudiese caminar un poco para que pudiese usar las muletas y se sintiera mejor. Aunque Estela se sentía tranquila porque la podía tener cerca en estos momentos, reconocía que no sería fácil su recuperación, Amanda simplemente estaba triste y de esta manera la recuperación sería más lenta; lo que no estaba segura era si estaba triste por toda la situación, el accidente, la operación, la silla de ruedas, estar fuera del trabajo o simplemente porque le faltaba algo o mejor dicho le faltaba alguien…

Estela miró por largo rato a su hija, demasiado tiempo para leerla. – A veces hay quienes queremos tener a nuestro amor a nuestro lado con el deseo más grande y genuino del corazón y lamentablemente lo perdemos, no porque quisiéramos, sino porque simplemente así sucedió. En cambio hay quienes pudiendo tener a su amor a su lado lo dejan escapar, hacen de lo fácil lo más complicado y terminan perdiendo al amor de su vida. ¿De qué tipo de persona eres tú? No puedes huir el resto de tu vida hija…
-      Estoy totalmente pérdida por ella Mamá.  – le confesó Amanda a su madre. – La amo totalmente.
-      Dime algo que no sepa y haz algo que aún no has hecho…
La puerta fue golpeada en repetidas ocasiones y Estela bajó las escaleras rápidamente para alcanzar llegar a ella, la abrió lentamente y se topó con la hermosa sonrisa de Cristina en la puerta. Estela le sonrió de vuelta y la abrazó fuertemente. – Que sorpresa más increíble. – le dijo al oído.
-      Yo estoy feliz de estar aquí. – comentó Cristina con una gran alegría.
-      Ven pasa mi niña.
Cristina caminó hasta dentro de la casa mientras Estela cerraba la puerta tras de ellas.
-      ¿Pero cuándo llegaste?
-      Estoy llegando, directo del aeropuerto.
Estela le sonrió complacida y permaneció observando cada detalle de aquel rostro, Cristina era una mujer sumamente hermosa, pero precisamente hoy se veía radiante y muy diferente; sus ojos expresaban algo tan único que Estela se llenó de esa misma sensación. Hacía ya mucho que conocía a Cristina, justamente el tiempo que Amanda y ella se conocían, eran muchos años y rápidamente fue aceptada como miembro de la familia. – Regresaste más ponto de lo que pensé.
Cristina le sonrió un poco nerviosa y comprendiendo muy poco su comentario.
-      Cris, ¿la amas? – Estela no pudo más aguantar la pregunta en su interior.
Cristina casi muere por la impresión de la pregunta, su cara reflejó un millón de sentimientos que no sabía cómo controlar.
-      Te dije que teníamos una conversación pendiente querida mía, ¿lo recuerdas?
-      Si, lo recuerdo. – solo alcanzó a responder.
-      Pero cambia esa cara por Dios, parecería que te pregunté algo muy malo o algo que ninguna de las dos sabemos; el hecho que no las digas no quiere decir que yo no las sepa.
A Cristina le temblaban las piernas, sentía que sudaba como si hubiese corrido un maratón y prácticamente balbuceaba al tratar de decir algo.
-      Ven acá preciosa. – Estela la tomó de las manos – Tu eres parte de esta familia y yo te adoro con todas las fuerzas de mi corazón, no tienes que temerme, ni sentirte angustiada, ni avergonzada porque jamás te haría daño, al contrario solo quiero tu felicidad. Ahora bien, ¿amas a mi hija?
Cristina la miró a los ojos y dijo con toda la sinceridad que su corazón le permitía. – La amo de la manera que jamás pensé que podría amar a alguna persona. Ella es… - cerró sus ojos y suspiró. -  la dueña de cada hermoso sentimiento que se encuentra en mi corazón…la única…
-      Lo sabía. – respondió Estela con la sonrisa más grande del mundo. – Ahora ve por ella y dile que la amas, llévala a casa, cuida de ella, porque lo único que ella espera es por ti, solamente tú la puedes hacer sobrellevar este terrible momento de su vida, solo tu mi niña…
Cristina se abrazó a Estela con gran sentimiento y la llenó de besos, estaba totalmente emocionada; le susurró al oído. – Gracias.
-      Gracias a ti. – contestó Estela. – Anda apresúrate, está en su habitación.
Cristina subió las escaleras rápidamente, tan rápido que sintió que volaba a medida que subía cada escalón. Al llegar a la habitación encontró a Amanda leyendo en la cama “El Peregrino”. – Si quieres podemos caminar por el camino de Santiago juntas de la mano.
Amanda soltó su libro de la impresión de escuchar esa voz tan conocida, miró a Cristina con los ojos bien abiertos y su expresión solo demostraba la gran sorpresa que experimentaba por ver a Cristina en su habitación. – Pero… ¿qué haces aquí?
-      Bueno si quieres me voy. – respondió Cristina con carita de niña triste.
-      Noooo…pero, te habías ido…y ahora…
-      Estoy aquí y regresé para quedarme.
-      ¿Pero el trabajo? – preguntó rápidamente sin dudar que era un tema importante.
-      Tengo cosas más importantes que resolver ahora y siempre habrá un proyecto esperando a ser dirigido y construido.
-      Pero es el sueño de tu vida, es por lo que tanto habías esperado.
-      Quizás, pero para mí tú eres más importante. – dijo acercándose al borde de la cama y sentándose. – Este libro es increíblemente bueno.
-      Lo es, me lo recomendaste. – comentó nerviosa de sentir la cercanía de Cristina.
-      Me agrada que lo estés leyendo.
-      Bueno es muchísimo mejor que mis demás recomendaciones, una de mi madre y otra de Kathy. – mientras tomaba dos libros de su mesita de noche y se los mostraba a Cristina.
Cristina sonrió al ver las portadas de los libros. – “La cabaña”, sin duda está fue la recomendación de tu madre y si no lo vas a leer ahora, lo haré yo porque siempre he querido leerlo y ahora es tiempo y bueno… - alzó el otro libro para mirarlo más de cerca. – No temo equivocarme que este te lo dejo Kathy, “Sexo, amor y otros misterios”
Amanda sonrió por el diálogo acertado de Cristina. – Eres una genia.
-      Solo a veces cuando son evidentes las cosas, pero es bueno ver que has dejado tú “El código de Da Vinci” en casa.
Amanda se movió y alcanzó otro libro, mostrándoselo a Cristina.
-      Mierda, he hablado muy rápido.
-      Siempre. – Amanda la miró profundamente a los ojos. – Te extrañé horrores.
-      Mmmm, ¿cómo amiga o como mujer?
Amanda le sonrió descaradamente y respondió. – Ya sabes…
-      Si pero quiero escuchártelo decir.
Amanda acortó la distancia entre ellas, acarició su rostro con el torso de su mano y clavó su mirada en los ojos de Cristina. – Te extrañé como mujer.
-      ¿Ah sí? – preguntó Cristina mordiendo su labio inferior. - ¿Cuánto?
-      Ufff demasiado.
-      ¿Y qué esperas para demostrármelo?
Amanda acercó sus labios a los de Cristina y los besó delicadamente, alejó un poco el contacto y con los ojos cerrados suspiró. – Tus labios son tan ricos Cris, me enloquecen totalmente.
Cristina permanecía aun con los ojos cerrados y se estremeció de escuchar esas palabras. – Amanda yo…
Amanda posó su dedo en sus labios para que guardara silencio. – Perdóname.
-      ¿Por qué? No tengo nada que perdonarte. – respondió totalmente sorprendida.
-      Sí, tienes que perdonarme la estúpida decisión de guardar silencio, de guardarme los sentimientos, de hacer que nada pasaba cuando todo pasaba. Cris he cometido el peor error de mi vida.
-      ¿Y cuál es ese? – susurró.
-      Dejarte ir sin decirte que te amo.
Cristina sintió que el corazón se detuvo una eternidad y luego comenzó a latir mil veces más rápido, era lo único que había deseado escuchar desde hacía mucho tiempo.
-      Desde el primer momento que te conocí me hiciste sentir una infinidad de sentimientos que no entendía, pero que día con día iban creciendo y se fortalecían. Simplemente lo he hecho desde…el primer día, pero mientras más sentía y mientras más pasaba el tiempo más trataba de apartar esos sentimientos porque no eran correctos, tú eras mi amiga y no solo eso; eras mi amiga hetero a la que deseaba y me enamoraba de ella a cada instante. Intenté mil cosas para apartarte de mi mente y engañar al corazón, pensar que solo era una confusión instantánea, un deseo pasajero, una sensación equivocada, pero fue inútil porque luchar con esos sentimientos me hacían acercarme más a ti y amarte más. He tenido tanto miedo, he tenido miedo de amarte de esta manera tan gigantesca, porque es un sentimiento jamás sentido, jamás expresado, jamás provocado; has venido a volcarme la vida, la cambiaste, la enloqueciste, la nutriste, la fortaleciste, la inspiraste. He tenido tanto miedo de decir que te amo en voz alta; no es lo mismo sentirlo en todo tu ser, sentirlo en toda tu esencia; que gritarlo y que ese sentimiento no sea correspondido. – Amanda besó nuevamente esos labios, pero esta vez con gran necesidad.
Cristina fue quien esta vez separó el contacto y le dijo suavemente.- No fue un error.
Amanda la miró con curiosidad y preguntó. - ¿Qué no fue un error?
-      Que hiciésemos el amor, no lo fue; lo deseaba igual tú, me moría porque me besaras, acariciaras, me amaras totalmente, toda yo lo pedía a gritos, fue lo más placentero, lo más hermoso, lo más rico, lo más exquisito, lo más perfecto que he podido sentir en toda mi existencia, porque…te amo Mandi. Amo tu voz porque me habla con ternura, porque es frágil, pero segura de lo que afirma, porque es dulce como la miel, pero excitante como la tentación, amo tu voz cuando ríes y derrochas esa simpatía que te caracteriza, cuando me susurra al oído lo que solamente nosotras necesitamos saber, cuando todo pareciera ir mal y acariciando mi pena dices “todo estaré bien”, cuando con tan solo pronunciar palabra alguna despierta toda clase de sensaciones que recorren toda mi piel, cuando con su tono me nutre el alma, me enamora el corazón, me seduce los sentidos, cuando me dice te amo y el mundo se detiene con el sonido de esas palabras que me llenan la vida…Amo tu sonrisa porque ilumina todo mi mundo, porque es apacible, pero discreta, porque es hermosa en cualquier sentido, amo tu sonrisa cuando se dibuja en tu rostro y a mis ojos maravilla, cuando te atrapo observando cada detalle de mí, cuando dice nada, cuando lo dice todo, cuando con amor me hipnotiza e inutiliza mis acciones, cuando sin pronunciar palabra alguna me cuenta una historia, cuando me inspira tu poesía, cuando me conquista con su picardía, cuando me eriza la piel, cuando está llena de inocencia y timidez, cuando me regalas tus estados de ánimos, cuando me expresa la esencia de tu ser en un tenue suspiro….
Cristina acarició los ojos de Amanda, los besó y continuó diciendo. -  Amo tus ojos porque en ellos me puedo perder con seguridad, porque me transportan a tu inexplorado, pero conocido mundo, porque me asoman la belleza de tu interior, amo tus ojos cuando me embriagan de locura, cuando se posan en mí, cuando son serenos, cuando son profundos, cuando son sensuales, cuando con toda sinceridad me expresan tu amor, cuando no los veo y solo los imagino, cuando en ellos me veo reflejada, cuando me miran sin mirarme, cuando con ellos me sonríes, cuando se pierden en mi propia inmensidad, cuando me trasmiten tranquilidad y me llevan a la calma, cuando de ellos se cuela alguna lágrima, cuando permiten que a través de ellos yo pueda llegar a tu corazón…
Esta vez acarició su rostro y lo observó con gran ternura. - Amo tu rostro porque es lo más hermoso que puedan mirar mis ojos, porque expresa tus sentidos, pero oculta tus verdades, porque es él, junto con tu cuerpo todo lo que me gusta tener, amo tu rostro cuando me regala todas sus caras, cuando está cansado y casi dormido, cuando se ilumina por la luz o cuando desaparece con la oscuridad, cuando lo imagino dormido, en reposo, en tranquilidad, sin ningún gesto aparente, cuando descubro tu sencilla belleza, cuando me sonríe, cuando me mira, cuando me habla, cuando reconozco cualquier expresión de amor, cuando se sonroja y se oculta, amo tu rostro de niña traviesa y de mujer comprometida, amo tu rostro con sus miles de manifestaciones a la hora de amar…
Amo tu corazón puro - Cristina puso ambas manos en el pecho de Amanda. -  tu sonrisa tierna, tu esencia clara, tus ojos profundos, tu rostro hermoso, tu personalidad afable, tu carácter seguro, tus ideas particulares, tu bondad infinita, tus labios sensuales, tu risa jovial, tu voz divina, tu cuerpo perfecto, tu espíritu guerrero, tu valentía arraigada, tu compromiso extremo, tu silencio oculto, tus gritos callados, tu complicada sencillez, tu entrega genuina... amo lo que entregas, lo que callas, lo que ocultas, lo que ofreces, lo que piensas, lo que sueñas, lo que deseas, lo que aseguras, lo que dudas…amo tu pasado, tu presente y tu futuro…te amo sin motivos, sin tiempos, sin condiciones, sin distancias, sin razón ni circunstancias. Amo de ti lo que nunca he amado antes, amo la mujer que fuiste, la mujer que eres y la mujer que serás, amo los días contigo y los días sin ti, amo los días de sol y los días grises, pero que sean junto a ti, amo todo lo que me haces sentir, amo tus alegría y tus tristezas, amo tu seguridad y tus dudas…te amo porque solo sabes quién soy; porque reconoces lo mejor de mí, te amo incluso si hoy me hubieses dicho que no me amas…simplemente te amo amor mío.

Amanda ya hacía mucho tiempo que lloraba por la emoción de escuchar cada letra recitada por Cristina, no había palabras que pudiesen expresar el sentimiento tan perfecto que inundaba todo su ser. Amanda la miró a los ojos como nunca antes, como si solo la mujer frente a ella existiera, como si el mundo alrededor se detuviese; el momento era tan perfecto y Amanda simplemente se nutría de cada detalle de su rostro, de su delicioso aroma, de su tierna caricia. Amanda acercó sus labios al cuello de Cristina lo besó con delicadeza y gran dulzura, deteniéndose luego de cada beso para aspirar su aroma, llegó hasta su oído y le susurró. – Te amo tanto Cris. – y continuó su trayecto hasta llegar a sus labios, que la esperaban con ansias. Amanda besó a Cristina como si fuese la primera vezque lo hacía, con una ternura insuperable, con una necesidad única, con un contacto eterno, con el amor puro que sentía en todo su ser. Luego de varios minutos aprovechó que Cristina abrió un poco su boca e introdujo su lengua encontrando y acariciando así mismo la de Cristina, la caricia provocó que de la garganta de Cristina brotara un suave gemido. Amanda sintió un escalofrió que recorrió todo su cuerpo muriendo en algunas partes muy particulares para ella que solo hicieron que aumentara su deseo. Se separó unos milímetros y le dijo suavemente. - Significas todo lo bello que puedo pensar, imaginar, sentir, soñar, dibujar, aprender, descubrir o desear… significas cada latido de mi corazón que no solo me da la esencia de la vida, sino también la esencia de la tuya propia... significas cada sonrisa que se dibuja en mis labios sin razón aparente, pero es porque te pienso y recuerdo cualquier momento hermoso vivido junto a ti... significas cada minuto que soy feliz, cada hora que me haces feliz, cada mes que eres mi felicidad... significas cada emoción que siento cuando te escucho, cuando te veo, cuando estoy próxima a llegar a ti porque mi timidez es la misma, mis nervios afloran y las mariposas siempre emigran al mismo lugar…significas lo que tanto había buscado y estoy segura en ti encontré... significas lo mejor de mis días, lo mejor de mi vida... significas el cielo, el sol, la luna, el día, la noche, la lluvia, el viento, cada hermoso paisaje, cada palabra, cada gesto, cada sentimiento, cada pensamiento, cada suspiro, cada sensación que compone mi entorno… significas tanto que las palabras, los detalles y las expresiones de amor se quedan cortas para demostrar al menos una parte de tu significado en mi vida… tu significado es aquel que nadie nunca había ocupado en mi vida…tu significado es sinónimo de amor…tu significado es el de la mujer que amo y la mujer que amo…eres tu cielo…
------------------------------------------------------------------------------------------------------
La Teta Feliz Historias y Relatos ® Sankh - Derechos Reservados
© Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser reproducida, ni en todo ni en parte, registrada o transmitida por un sistema de recuperación de información, en ninguna forma ni por ningún medio, sea mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopia o cualquier otro, sin el permiso previo, por escrito, del autor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ir arriba

Aviso Legal:

Esta web de entretenimiento ofrece peliculas y series gratis online tanto en castellano, subtitulado, audio latino e idioma original. Sin embargo cabe aclarar que en esta web no se alojan películas, series ni ningún tipo de archivo de streaming o descarga, todo material publicado aquí son enlaces de libre distribución que han sido recolectados de servidores de video como vk.com, vimple.ru, youtube.com, etc. Por lo tanto nosotros no nos responsabilizamos de su contenido, si se tendría que reportar alguna película por favor repórtala en el sitio donde ha sido hosteada, ya que nosotros somos ajeno a esos servidores.