La mujer, natural de Huelva, empezó a trabajar en la concesionaria en 2003 y con casi diez años de antigüedad ha asegurado que se ha sentido discrimina y marginada por ser "mujer y lesbiana".
Una conductora de autobuses, trabajadora de la empresa concesionaria de líneas públicas de transporte de viajeros por carretera, ha denunciado que fue "despedida por homofobia", al haber trascendido que es lesbiana, y por denunciar a la firma en la Inspección de Trabajo en varias ocasiones.
María Dolores Martín ha manifestado que la empresa le comunicó su "despido objetivo" con la excusa de que necesitaban realizar una reestructuración de línea y que sobraban conductores.
"¡Qué casualidad que sea a mi a la que le despiden!", ha exclamado Martín y ha explicado que la concesionaria lo llevaba intentando durante dos años para que fuese un "despido disciplinario" a base de sanciones pero ha detallado que las ha ganado todas en el Juzgado de lo Social en Sevilla.
Fue la primera y única mujer en la empresa hasta 2007 y cuando entró a trabajar en ella tuvo que pedir a través de un comunicado un uniforme para mujeres, porque dice que puede "ser lesbiana pero no ningún hombre" y ha reiterado que tiene que llevar uniforme de mujer.
"Nunca he ocultado mi condición sexual en la empresa y se ha criticado bastante porque entre compañeros hablaban y ha habido muchas mofas", ha incidido Martín.
Cuando entró en vigor la ley que permitía el matrimonio entre personas del mismo sexo en España se casó, y ha asegurado que nunca le dieron el pase de empresa para su ahora exmujer y ha asegurado que a todos sus compañeros se los daban incluso sin estar casados.
En 2006 pidió el traslado a Sevilla y ha indicado que trabajó todos los festivos y domingos del año, excepto dos, y a sus compañeros le respetaban por lo menos un domingo al mes.
Por su parte, el secretario general de CGT-A, Miguel Montenegro, ha afirmado que María Dolores "ha sido vejada" y que es una trabajadora bastante "activa" que tiene denuncias "en materia de reclamación por los derechos de conducción y de descanso".
El despido está impugnado ante el Juzgado de lo Social de Sevilla y está previsto el juicio para el 24 de abril.
Fuente: Cascaraamarga.es
Qué indignante caso. Ojalá que gane la demanda, aunque si la reinstalan en su empleo, es posible que le sigan haciendo la vida de cuadritos. Y algo que he visto mucho y no puedo entender, es por qué a los hombres homosexuales les tienen más aceptación y consideraciones que a las lesbianas en casi todos los ámbitos. ¿Será que "algo" les hace a los jefes (preferentemente hombres y aparentemente heteros) ser más tolerantes con ellos? Difícil saberlo.
ResponderEliminarLsgriegas (México)